viernes, 25 de enero de 2019

Boletín 185: DONDE HAY UNA NECESIDAD RUGE UN LEÖN



A fines del 2018 había alrededor de 7500 millones de habitantes en el mundo. Algunas proyecciones estiman que la población mundial podría llegar a 11.400 millones en el año 2050 y a 15.300 millones en 2100.
De los 194 países soberanos de la Tierra, alrededor de 40 son países desarrollados donde la pobreza no es tan marcada, aun cuando existe en algunas de sus regiones; mientras en los otros 154 países y los 25 a 30 territorios adicionales, mucho más de la mitad de la población es pobre  y hay porcentajes muy altos de habitantes extremadamente pobres.
De la población del mundo, cerca del 10% (750 millones) vive en extrema pobreza, con menos de dos dólares diarios por persona y apenas subsiste. La máxima preocupación se centra en el África subsahariana, donde la ratio de pobreza sigue siendo del 35,2%. Aun así, la tasa ha bajado más de 20 puntos porcentuales desde el 56% de 1990. En la región del Asia Meridional el porcentaje estimado de población en situación de extrema pobreza   es del 13,5%. [1]_/
De acuerdo con el informe “Panorama Social de América Latina 2018 presentado por la CEPAL hace pocos meses, en América Latina y el Caribe la población pobre del 2017 era similar a la de los dos años anteriores, 184 millones (30,2% de la población), de los cuales 62 millones se encontraban en la extrema pobreza (10,2% de la población, el porcentaje más alto desde 2008).
Por lo expuesto, las Naciones Unidas han pedido a los gobiernos de todos los continentes, que desarrollen con urgencia políticas efectivas para eliminar la extrema pobreza hasta el año 2030; pero, a pesar de que, en algunos países como China, se han obtenido resultados espectaculares, sacando de su precaria situación en 35 años a 800 millones de personas, la meta mundial está todavía lejana. De otro lado, queda como objetivo para muchas décadas más, la atenuación de la pobreza no extrema, que afecta a más de la mitad de la población total.
Vista la incapacidad de los gobiernos para cumplir con el objetivo de erradicar la pobreza extrema en el mediano plazo, muchas organizaciones privadas e incluso numerosas personas, cuentan con programas de ayuda a los menesterosos, a nivel mundial, regional o en países y lugares determinados.
Uno de esos organismos es el Club de Leones Internacional que, en 206 países, cuenta con más de 48 mil clubes asociados y más de 1,4 millones de afiliados dispuestos a aportar con dinero y trabajo para ayudar a personas muy pobres.
Al 31 de diciembre de 2018, sobre un total de 1,44 millones de socios, el 27% de los Leones estaba en India, Sur de Asia, África y Oriente Medio; el 22% en Oriente y Sureste de Asia, el 21% en Estados Unidos y su área de influencia directa, el 17% en Europa, el 7% en América Latina y el Caribe; y, el 5% en Canadá y Australia con el Pacífico cercano.
La cuarta parte de los 48.065 clubes está en Estados Unidos, una quinta parte en la India y las áreas cercanas, otra quinta parte en Europa, el 18% en Oriente y Sureste de Asia y el 7% en Canadá y Australia con el Pacífico cercano.
Para celebrar 100 años de servicio de los Leones a la sociedad, cada club del mundo debía organizar por lo menos un proyecto de servicio durante cada una de las campañas anuales. Las campañas incluían: atender a la juventud, combatir los problemas de visión de las personas, mitigar el hambre y proteger el medio ambiente. La meta era atender a 100 millones de personas hasta junio de 2018.


El resultado obtenido hasta junio de 2018 más que duplicó las metas y las personas atendidas sumaron 250 millones, con un éxito impresionante de los clubes de Leones y beneficios enormes para quienes lograron satisfacer sus necesidades.

En efecto, a la atención de la juventud se dedicaron 34235 clubes, beneficiando a poco más de 75,2 millones de niños y jóvenes; con respecto al ambiente, participaron 28076 clubes y atendieron a más de 74 millones de personas; para mitigar el hambre, intervinieron 28321 clubes y se beneficiaron 55 millones de seres; para atender problemas de visión, actuaron 20321 clubes apoyando a 18,3 millones de personas. Para la atención de la diabetes se unieron 14186 clubes, que se preocuparon por cerca de 7 millones de pacientes.
A mediados de este mes, en Rosario, Argentina, se reunieron los clubes de leones de América Latina y el Caribe, en su Foro anual, llamado FOLAC XLVII, en el que intercambiaron información sobre las actividades realizadas individualmente y se plantearon nuevos retos, con oportunidad de la celebración del centenario de fundación del primer Club.
Los asistentes al FOLAC, alrededor de 1500, declararon con mucha alegría que, por ser Leones, son ciudadanos del mundo que hacen parte de la institución de servicio humanitario más grande, más antigua y eficiente del mundo.

Dijeron también que les unía un gran espíritu de civismo, sentido de solidaridad y generosidad, porque compartían su tiempo, recursos y capacidades personales, para ayudar a las comunidades, las instituciones y las personas que requieren de apoyo, porque en sus países el Estado no ha podido o no ha querido ayudarles.
Una de las exposiciones más importantes del FOLAC, el 18 de enero de 2019, fue la del doctor Polibio Córdova Calderón, presidente del Consejo de Gobernadores del Distrito Múltiple G - Ecuador, la que se resume en este Boletín, porque muestra la forma en que un conjunto de individuos solidarios de muchos países, trabaja por reducir los problemas de ambiente, alimentación, salud, educación, de los más pobres de América Latina y el Caribe, con prácticas dignas de felicitar y emular.
En esa exposición se dieron a conocer datos muy interesantes:
En 19 países de América Latina y El Caribe existen 4189 clubes de Leones y 107 mil socios. Los países que cuentan con el mayor número de clubes es Brasil, con 1504; le siguen México con 489, Perú con 301 y Argentina con 282. Ecuador tiene 110 clubes.
Los casi 107 mil Leones de la Región se distribuyen así: 41 mil en Brasil (38%), 11500 en México (casi 11%), cerca de 8 mil en Centroamérica (7,5%), 7400 en Venezuela (7%), 7100 en Perú (6,6%). En Ecuador 2875 (2,7%).
Los proyectos ejecutados por los clubes de Leones en la Región beneficiaron al 16% del total mundial, o sea a 21,5 millones de personas. El mayor porcentaje se concentró en la atención a los problemas de visión (38%), y la mitigación del hambre (25%). Los trabajos con la juventud beneficiaron al 22% de las personas y la atención al medio ambiente, al 14%.
En términos monetarios, los aportes leonísticos a la celebración del Centenario sumaron 237 millones de dólares, de los cuales el 37% se destinó a los problemas de visión, el 25% a los trabajos con la juventud, el 20% a la mitigación del hambre y el 18% a los temas ambientales.
Otros campos de acción fueron la salud, la educación, la vivienda, el servicio a la niñez, el servicio a los adultos, la atención al adulto mayor, los servicios a los discapacitados, el apoyo a los centros artesanales, la operación de consultorios jurídicos gratuitos.
El aporte estimado para todos esos servicios fue de 357,1 millones de dólares, con una gran dedicación a la salud (69%) y contribuciones valiosas para educación y servicio a la niñez (7% cada uno), más vivienda (6%). Los otros sectores en conjunto apenas recibieron el 9%.
Sumados los aportes para la celebración del centenario y para otros efectos, la cantidad es muy importante, pues los beneficiarios suman 52,7 millones y el aporte monetario llega a casi 600 millones de dólares.
Cuarenta millones de los beneficiarios correspondieron a América del Sur (Brasil 12,3 millones), 7,1 millones a México, 3,8 millones a Centro América y 1,6 millones al Caribe, para un total de 52,7 millones.
El aporte estimado por los servicios para América Latina y el Caribe sumó 594 millones y a América del Sur se dirigieron las tres cuartas partes del total. México recibió el 17%, América Central el 6% y el Caribe el 2,7%.
Al final de su exposición, el doctor Polibio Córdova resaltó la importancia de los mensajes de la presidenta del Club de Leones Internacional, Gudrun Ingvadottir, quien dice: “Ser León no es hacer lo mismo año tras año en nombre de la tradición. Es buscar cómo se puede servir mejor. Eso requiere creatividad.”
Y señala que, para lograr el éxito de cada Club, lo que se necesita es aumentar el número de socios, conservar los actuales, formar líderes, efectuar un aumento equilibrado de socios hombres y mujeres de todas las edades y de distintas esferas de acción, impulsar la amistad entre Leones y saber que lo que más une es el servicio a la comunidad necesitada de apoyo para salir adelante.
Propone, además, que hay que revivir el arte de la narración, que facilita la explicación de los objetivos de los Leones y se basa en seis premisas: a quién va dirigido el mensaje, dónde se lo debe expresar, cuándo es oportuno, por qué razón, qué resultados se espera y cuál será la reacción de la población.  
Plantea que las causas globales que debe atender el leonismo en el nuevo siglo deben ser: la preservación del medio ambiente, la mitigación del hambre, la atención a los problemas de la vista de la gente, el cáncer infantil y la diabetes.
La señora presidenta del Club de Leones Internacional tiene mucha razón y lo explico, señalando en cada caso la importancia del tema.
El deterioro del ambiente es una preocupación mundial, porque las condiciones de vida están deteriorándose cada día en todo el mundo y las catástrofes que se prevé harán peligrar la existencia de todos o casi todos los seres vivos, si no se las evita con la urgencia del caso.
Se debe tener en cuenta que el día del sobregiro ecológico del año 2018 se produjo el 1 de agosto, cinco meses antes de que finalice el año y que en siete meses la humanidad se gastó todos los recursos que la Tierra tiene capacidad de generar en 12 meses. [2]_/
Lo segundo es de suma urgencia, pues hay alrededor de mil millones de personas que pasan hambre, sobre todo en África y otras regiones donde la población muere desnutrida y famélica, porque la distribución mundial de los alimentos es injusta, empezando por el agua, que unos países tienen y otros no, siendo vital para todos. Se dice que las guerras de este siglo en varios casos se darán en la lucha por contar con el líquido vital.
Eliminar los problemas de la vista es una necesidad de 250 millones de personas cada año, afectadas por ceguera y varios problemas de discapacidad visual que se acentúan con la edad. Existen enfermedades oftalmológicas que tienen su comienzo a partir de los 40 años e inicialmente pueden pasar desapercibidas, como el glaucoma, las cataratas, la retinopatía diabética o la degeneración macular asociada a la edad, cuyo pronóstico mejora si el diagnóstico es temprano y se evitan complicaciones irreversibles, y por otro lado porque existen signos oculares que pueden ser el punto de inicio en el diagnóstico de una enfermedad sistémica que requiera un tratamiento.
El cáncer infantil es la segunda causa más frecuente de mortalidad infantil en niños con edades comprendidas entre 1 y 14 años; además, cada año, otros 160 mil niños son diagnosticados con cáncer en el mundo. Siete señales de cáncer infantil son: palidez, moretones, sangrado y dolor en los huesos; nódulos (bultos) o hinchazón, especialmente sin fiebre, ni dolor; pérdida de peso, fiebre, tos, falta de aire, o sudoración nocturna; inflamación abdominal, dolor de cabeza, vómito; dolor en piernas, brazos, o hinchazón.
La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la sangre están muy altos. La glucosa proviene de los alimentos que consume. La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, la más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre. [3]
Según las estimaciones de la OMS, 422 millones de adultos en todo el mundo tenían diabetes en 2014, frente a los 108 millones de 1980. La prevalencia mundial (normalizada por edades) de la diabetes casi se ha duplicado desde ese año, pues ha pasado del 4,7% al 8,5% en la población adulta. [4]_/
Felicitamos a los Leones por lo hecho en su primer siglo y por sus magníficas ideas para los siguientes cien años. Que se oiga y copie sus generosos rugidos y que la atenuación o eliminación de los problemas arriba enunciados cuente con un concurso importante de los Leones de todo el mundo.
También destacamos la importante investigación del doctor Polibio Córdova que, por decisión de los organizadores del FOLAC, se actualiza cada año desde hace varios periodos.










[1] _/ https://www.lavanguardia.com/vangdata/20151010/54438008482/cuanta-gente-mundo-situacion-extrema-pobreza.html
[2] _/ EL COMERCIO, El 2018 deja un saldo negativo al Planeta. Quito, Ecuador, enero 6 de 2019.

sábado, 12 de enero de 2019

BOLETÍN 184: POR UN ECUADOR COMPETITIVO


La productividad nacional es la suma de la competitividad de las empresas y la efectividad del Estado en todo lo que se refiere a la construcción de infraestructura (no necesariamente con sus recursos financieros) y la dotación de los servicios modernos.

En este artículo me referiré solamente a la competitividad y dentro de ella a la competitividad empresarial internacional. 

La competitividad, según la RAE, es la capacidad de competir.

La competitividad empresarial es la capacidad de las empresas para mantenerse en el mercado, competir y lograr una posición principal y eventualmente el liderazgo en el sector de actividad, sobre la base de la diferenciación de sus productos.

La competitividad empresarial en el mercado internacional es la capacidad de una empresa de posicionarse en uno o más mercados foráneos sobre cuatro columnas: calidad, precio, cantidad y oportunidad de acceso al mercado. 

Leo todos los días artículos de diversos expertos y también de neófitos en el tema, en los que sus autores cuando más consideran tres de esos elementos necesarios para que un producto tenga competitividad y se olvidan del más importante de todos. En efecto, hablan de calidad, precio y cuando más de cantidad; pero, no se refieren a la oportunidad de acceso al mercado.

Piden al gobierno seguridad jurídica, incentivos tributarios a largo plazo para la inversión, remuneraciones para los trabajadores similares a las de otros países que pagan menos por salarios, aranceles y restricciones cero a las importaciones. Pero se olvidan o ignoran que la parte mayor del queso está en el conjunto de costos que hacen posible acceder al mercado exterior, entre ellos los fletes y seguros, las tasas portuarias o aeroportuarias, los costos de desestiba en los puertos y aeropuertos de llegada, los aranceles y restricciones de importación, el transporte interno en el mercado de destino, las utilidades de los importadores, los mayoristas y los minoristas.

Veamos los costos internos, tomando como referencia a la FAO. Esos costos se dividen en fijos y variables. Los primeros valen igual si producimos una unidad o un millón. Los variables cambian según la cantidad de productos que estemos en capacidad de producir.
Para efecto de este análisis lo que importa es que ellos suman el costo FAS (libre al costado de buque o del avión) de una exportación y que, en relación con el precio al consumidor suman en su conjunto no más de un 25% a 30%, porque el resto es costo externo.

1. COSTOS VARIABLES (directos):
1.1. Materia prima: Todo bien cuya finalidad sea su transformación durante un proceso de producción hasta convertirse en un bien de consumo
1.2. Mano de obra directa: trabajo aplicado efectivamente a la producción de un bien.
1.3. Supervisión: Control de la producción, para que no haya defectos.
1.4. Mantenimiento: revisión periódica de las maquinarias para que funcionen bien.
1.5. Servicios: productos intangibles necesarios a la producción, como agua y energía.
1.6. Suministros: abastecimientos oportunos de materia prima y servicios.
1.7. Regalías y patentes: pagos por propiedad intelectual a sus poseedores.
1.8. Envases: objetos que permiten almacenar cantidades de ciertos productos.
2. COSTOS FIJOS
2.1. Costos Indirectos
2.1.1. Costos de inversión:
2.1.1.1. Depreciación. Valor equivalente al desgaste anual de una máquina.
2.1.1.2. Impuestos. Pagos al Estado para financiar sus actividades.
2.1.1.3. Seguros. Pagos que cubren eventuales pérdidas de bienes.
2.1.1.4. Financiación. Pagos por créditos obtenidos para producir.
2.1.1.5. Otros gravámenes. Pagos prediales, tasas, otros.
2.1.2. Gastos generales:
2.1.2.1. Investigación y desarrollo. Inversión destinada a mejorar la producción.
2.1.2.2. Relaciones públicas. Gastos en publicidad y promoción de la producción.
2.1.2.3. Contaduría y auditoría. Gastos destinados a llevar registro y control de ingresos y gastos y determinar utilidades o pérdidas.
2.1.2.4. Asesoramiento legal y patentes. Gastos en abogados y temas jurídicos.
2.2. Costos de Dirección y Administración: Gastos en personal directivo y administrativo.
2.3. Costos de Ventas y Distribución: Gastos de venta y entrega de las mercaderías. [1]_/

Si las utilidades de cada mayorista y minorista fuesen modestamente del 10% sobre el costo para cada uno, el arancel el 5%, el flete marítimo el 10% y el seguro el 3%, tenemos que, a partir del precio FAS (al costado del buque) los valores externos suben así: 100% del FAS más 3% seguro = 103 más 10% de flete = 113,3 más 10% de arancel = 124,63 más 5% de desestiba = 130,86 más 5% transporte interno =  137,40 más 10% utilidad importador = 151,14 más 10% mayorista = 166,25 más 10% minorista = 182,88.

Con esas consideraciones, volvamos a que la competitividad requiere de calidad, cantidad, precio y oportunidad de acceso al mercado.

La calidad, por supuesto, debe ser igual o mejor que la de los competidores. En lo posible debe tener signos notables de diferenciación, que hagan que el producto sea más atractivo para el consumidor.  Si se trata de bienes alimenticios como frutas, no tener ninguna enfermedad o demostración de deterioro, estar bien envasados o empacados y durar sin problemas los días necesarios hasta su consumo final. Si se trata de bienes durables, como electrodomésticos o autos, son básicos el crédito a mediano o largo plazo según el producto, el servicio posventa para varios años, la disponibilidad en ese tiempo de repuestos del modelo adquirido y la cercanía de los proveedores.

No hay que olvidar que en el mercado internacional es de gran importancia lograr el mejor abastecimiento de materias primas de calidad para los productos a exportar, de manera que conseguir precios bajos CIF de esas materias primas es esencial. Para ello hay varias posibilidades: pago anticipado, compras voluminosas, contratos de abastecimiento a largo plazo con descuentos interesantes, canje de materias primas por productos terminados, trueque de servicios, fletes baratos, llegada oportuna.

El precio debe ser el más conveniente de acuerdo con la calidad. No se puede comparar la calidad de un auto Mercedes Benz con un escarabajo Volkswagen en función del precio, pero sí se lo puede hacer entre un Mercedes y un BMW o un Volvo de la más alta gama.

La cantidad es esencial para participar en el mercado internacional.  Para empezar, hay que definir un lote mínimo exportable que por lo menos cubra los costos. Si el lote mínimo es de 10 toneladas de un producto o 20 cajas de 48 unidades, no se puede hacer un contrato por menos de eso, porque la operación va a generar pérdida. Además, hay que considerar que mientras un lote llega al demandante, otro debe estar en camino o en bodega y un tercero en fabricación. Los capitales necesarios para eso tienen un costo financiero que hay que considerar.

La oportunidad de acceso al mercado es la diferencia entre el FAS y el precio de venta al público en el mercado extranjero. Entonces, engloba el flete marítimo, el seguro, los impuestos y tasas de importación, los costos de transporte interno, los costos y utilidades de los importadores, distribuidores, vendedores al detal, según el tipo de producto.

Y aquí está el meollo del asunto. Generalmente los costos internos de los productos de exportación representan un 25% a un 30% del precio para el consumidor y los costos externos (precio al consumidor menos el FAS) entre el 75% y el 70%. En consecuencia, lo que se haga al interior del país por bajar el costo del dinero para las inversiones, los salarios, los impuestos, es importante pero solo incide sobre el 25% y hasta el 30% del precio al consumidor y aporta poco a la competitividad.

Es fundamental actuar sobre los costos externos. ¿Cómo hacerlo?

Con respecto a la logística, mejorando las capacidades y facilidades de los puertos y aeropuertos internacionales del país, para que los barcos y aviones lleguen, descarguen y carguen en tiempos óptimos y cobren fletes reducidos; las travesías sean seguras y directas a los sitios de destino, reduciendo costos tales como los de hacer escalas y trasbordos, generar pérdidas por mala manipulación y bodegaje, cambios de operadores y otros; logrando que las mercaderías lleguen en condiciones óptimas, lo que favorece la recepción de más pedidos.

En cuanto a los aranceles y las restricciones no arancelarias, lo deseable es que no existan o sean poco significativos. Por ello, son fundamentales los acuerdos comerciales, que garantizan en el largo plazo normas estables para el comercio, tendiendo o logrando cero aranceles y solo restricciones imposibles de evitar como las normas sanitarias o las de calidad industrial.

Las restricciones cuantitativas han desaparecido o se han reducido para la gran mayoría de los productos de comercio internacional, pero lamentablemente, se han multiplicado las restricciones cualitativas, que hacen que sea más difícil penetrar en ciertos países o bloques.

Para el Ecuador es fundamental abaratar los costos externos y en función de ello es bueno que se avance a paso acelerado en la construcción del puerto de aguas profundas de Posorja, en el mejoramiento del calado de los otros puertos, en el dragado del puerto de Guayaquil, porque todo ello va a contribuir a que lleguen al país barcos de mayor capacidad de carga, incluso los post Panamá, con la consecuente rebaja en los fletes y ya que en Posorja se instalarán grúas y equipos muy modernos, los tiempos de carga y descarga serán más rápidos y con mayores garantías para los importadores y exportadores.

También sería importante que los aeropuertos de Manta y Cuenca se vuelvan internacionales, para que ellos y los de Quito y Guayaquil operen con muchas rutas y frecuencias en forma creciente, de manera que las mercaderías no tengan que ser transferidas en escalas en varios aeropuertos, lo que produce pérdidas, maltrato y trámites demorados, con lo cual quienes llegan primero a los lugares de destino son los competidores y no los productos nacionales.

Hace falta y lo hemos señalado varias veces, que se construya en su totalidad la autopista Quito – Guayaquil. Con ello se pondría en funcionamiento la columna vertebral del sistema de transporte terrestre ecuatoriano y sería menor el costo del transporte interno entre los principales centros de producción y comercialización de productos. Incluso podrían circular vehículos de mayor capacidad de carga y a mayor velocidad con seguridad.

Finalmente, para alcanzar competitividad, es bueno recordar a los productores y a quienes quieren incorporarse a la exportación de productos, que deben siempre formular un proyecto exportador, cuyas pautas básicas son las siguientes:

Definición de la capacidad instalada y oferta exportable; determinación del mercado potencial, selección del mercado meta, determinación de un programa de ventas, determinación del lote mínimo exportable, valorización del lote mínimo exportable como módulo de costos, estimación del tipo de cambio como factor de costo, estimación de las tasas de interés y de las tasas de inflación, determinación del costo variable y una fórmula de eventual reajuste de precio, selección de índices internacionales para referir los elementos del costo variable, valorización del programa de ventas, valor presente de los flujos monetarios, descuentos de costos posibles como tributos internos y otros, calcular la utilidad del proyecto, determinar el punto de equilibrio del proyecto, evaluar económica y financieramente el proyecto, efectuar una evaluación social y ambiental del proyecto. [2]_/

Es natural que no todos los productores de productos de exportación puedan llegar a ser exportadores ni tengan los conocimientos y la capacidad económica para adquirir esa capacidad empresarial; pero, en esos casos, si su producto es competitivo en precio y calidad, lo que les conviene es iniciarse acudiendo a exportadores reconocidos para que sean ellos los que exporten, aliarse en consorcios de exportación con otros productores, buscar asesoramiento del gobierno o de los organismos de exportadores para tener clara la posibilidad de vender en uno u otro país su mercadería y así superar las barreras relativas al lote mínimo exportable y a la oportunidad de acceso al mercado internacional.

AVISO. Muy pronto, por Radio Sensación 800 AM, estaremos transmitiendo información diaria procedente de estos boletines y también términos del diccionario económico que elaboramos, para que los amables lectores y los radioescuchas tengan mayores elementos de juicio sobre la realidad de la economía nacional.


[2] _/ NARBONA HERNÁN: Los Secretos del Negocio. Editorial CONOSUR. Chile