BOLETÍN 253: LAS RELACIONES ECONÓMICAS ECUADOR - CHINA
La República Popular China es la
tercera en la lista de países más grandes del mundo, abarca 9,6 millones de
kilómetros cuadrados. Su población total es la mayor del Planeta y suma más
de 1350 millones de habitantes, siendo el grupo etario más importante el que está
entre 15 y 65 años. Registra 56 grupos étnicos diferentes. … La ciudad que
tiene más habitantes es Shanghái (20 millones aproximadamente), considerada la
más poblada del mundo.
Debido a su política de que toda familia solo tenga un hijo, que rigió por
bastante tiempo, pero ya no se aplica, se estima que la India le superará en población
en la próxima década y que se notará un fuerte envejecimiento poblacional, lo
que puede afectar a sus actividades productivas.
La tasa de alfabetización en China supera el 84%, y una particularidad con
relación a la educación es que es muy competitiva en todas sus etapas. La
educación es gratuita entre los seis y los 15 años, ya que es la etapa
obligatoria ... En los últimos años, el gobierno ha invertido mucho más en
educación que en el pasado, especialmente en la mejora de los edificios y en la
contratación de más profesores. Como la educación a partir de los 15 años paga
tasas, la cantidad de estudiantes en la educación superior disminuye
considerablemente. https://www.chinapass.com.ar/nota/Particularidades-y-caracter%C3%
ADsticas-de-un-pa%C3%ADs-sorprendente/
China es la segunda
economía más grande del mundo en términos de producto interior bruto nominal y la mayor
economía del mundo en paridad de poder
adquisitivo (PPA), según el Fondo
Monetario Internacional. Su PIB nominal, estimado en 18.4 billones de dólares
(2021) representa alrededor del 18% de PIB mundial. El PIB en paridad por poder
adquisitivo representa casi el 19% del PIB global. Es el país de más
rápido crecimiento
económico en el mundo desde la década de 1980, con un
promedio de crecimiento anual de casi el 10% en los últimos 38 años. Según
datos oficiales del Buró Nacional de Estadísticas, la economía del país creció
un 9,2% en 2021 debido al efecto rebote en la economía causado por la pandemia de
COVID-19.
Por mucho tiempo
se la consideró gran productora de bienes agropecuarios, de la industria textil
y de manufacturas de poca calidad derivadas de su aprendizaje manufacturero,
pero esa situación ha cambiado radicalmente, al punto que exporta a Estados
Unidos y la Unión Europea productos muy competitivos, y está presente en el
mercado internacional en magnitudes cada vez más importantes.
China tiene una
economía ligada a los mercados internacionales tanto industriales como financieros. Según la
Federación de Industria y Comercio de China, el PIB se genera en más del 60%
por empresas del sector privado; sin embargo, varios académicos, tanto chinos
como extranjeros, calculan que la aportación del sector privado al PIB de ese
país está entre el 70% y el 80%. Además, los recursos son asignados y los
precios determinados en su mayoría por mecanismos de mercado. Las empresas
privadas representan el 90% del total de empresas del país. El estado chino a
su vez controla y monopoliza sus sectores estratégicos y mantiene una notable
regulación económica, siendo las empresas más grandes de China mayoritariamente
estatales. A esta forma de economía el gobierno chino la denomina «economía de
mercado socialista» o «socialismo con características chinas».
En las últimas
décadas ha ingresado en varias organizaciones económicas internacionales y ha
suscrito varios tratados comerciales. Por ejemplo, el país entró en la Organización
Mundial del Comercio (OMC) en el año 2001 y en la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en
el 2010. Según datos presentados por la OMC
en su página oficial, China actualmente posee acuerdos comerciales con la
ASEAN, la Asia Pacific Trade Agreement (APTA), Economic Cooperation Framework
Association (ECFA), Australia, Chile, Costa Rica, Hong Kong, Macao, Noruega, Nueva
Zelanda, Pakistán, Perú, Singapur y Suiza.
China ocupa el
puesto 60º en ingreso per
cápita nominal y el 71º en PIB PPA, según datos de 2021 del FMI. Las
provincias costeras tienden a estar más desarrolladas e industrializadas,
mientras que las regiones del interior del país son más rurales y poseen un
menor desarrollo. El Presidente de China, Xi Jinping, proclamó en el año 2013
el Sueño Chino y fijó como meta a
corto plazo lograr que en el año 2021, la sociedad china viva al menos
modestamente acomodada, y como meta a largo plazo que China se convierta en
un país
completamente desarrollado para el año 2049. Ambas fechas tienen una
importante carga simbólica, pues en 2021 se celebró el 100º aniversario de la
fundación del Partido
Comunista de China y en 2049 será el centenario de la fundación de
la República
Popular China. En 2018, el Ministerio de Comercio anunció que
habían salido de la pobreza 68 millones de personas en los últimos cinco años,
o lo que es lo mismo, una reducción anual de al menos 13 millones de personas.
El gobierno se propuso eliminar la pobreza absoluta para finales de 2020, pero
el COVID alteró los planes.
Desde 1980, China
ha ido estableciendo zonas económicas especiales, basadas en experiencias
exitosas en distintas áreas. El gran desarrollo en infraestructuras del país
quedó documentado en un informe de KPMG de 2009 y
ha continuado produciéndose rápidamente.
Por mucho tiempo,
China fue criticada por los medios de
comunicación de Occidente por practicar
comercio desleal, incluida la devaluación artificial
del yuan, el espionaje
industrial y el robo de propiedad
intelectual, junto con proteccionismo y
favoritismos locales; pero, su avance tecnológico ha hecho que, de crítica y
copiadora de la propiedad intelectual extranjera pase a ser una defensora https://es.wikipedia.org/wiki/Econom%C3%ADa_de_la_Rep%C3%BAblica_Popular_China
Debido a su gran
acumulación de reservas monetarias, se ha transformado en prestamista para
países que tienen recursos naturales, los cuales se han vuelto garantías para
los préstamos. En América Latina varios países han tenido que acudir a China
para obtener préstamos cuyas condiciones han sido mucho más gravosas de las que
solicitan los organismos multilaterales de crédito.
Sus principales brazos de inversión son el China
Development Bank y el Export-Import Bank of China, y a través de ellos el
gigante asiático se ha convertido en el banquero de América Latina.
Los cinco países más deuda han contraído con las entidades públicas
chinas son: Venezuela, Brasil, Ecuador, Argentina y Bolivia. https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-50574118
Las principales exportaciones de China incluyen aparatos de transmisión para radio telefonía (9%), máquinas y unidades automáticas de procesamiento de datos (5,9%), circuitos integrados electrónicos y micro ensamblajes (4,1%) y aceites de petróleo (1,5%). Las importaciones principales son: circuitos integrados electrónicos y microestructuras (14,8%), aceites de petróleo (11,5%), minerales de hierro (4,8%), gas de petróleo (2,5%) y vehículos motorizados (2,3%).www.google.com/research
Según la OMC, la
exportación de bienes en 2019 fue de 2.499,4 mil millones USD, mientras que las
exportaciones e importaciones de servicios en 2019 llegaron a 281.600
millones USD y 497 mil millones USD respectivamente. China señaló un aumento
global de 19,5% en exportaciones y 18,7% en importaciones en 2019. Según datos
del Banco Mundial de 2019, el superávit comercial de China por bienes fue de
425.200 millones USD, lo que representa un aumento con respecto a los 395.100
millones USD de 2018. La balanza comercial general (incluyendo los servicios)
fue de 164.100 millones USD en 2019, en comparación con 103 mil millones el año
anterior.
He preferido
poner por delante esta información, para que se tenga clara la situación
económica general, la producción y las finanzas de China, país con el cual el
presidente Lasso quiere llegar a varios acuerdos que, si se los logra, podrían
darle un importante impulso al Ecuador desde los próximos años.
CHINA –
ECUADOR. Las relaciones chinas con el
Ecuador eran tradicionalmente modestas, por la anterior situación económica
china y por la distancia entre los dos países, pero productos chinos, entre
ellos juguetes, porcelana, utensilios de cocina, han venido por mucho tiempo
desde Panamá de contrabando; China desde 2007 financia con miles de millones de
dólares al gobierno y apoya varios proyectos en diversas áreas, especialmente
petroleras; y, desde 2009 compra petróleo sobre la base de facilidades, con lo
que los intereses comunes han subido enormemente.
En
noviembre de 2007, Correa fue a China invitado por su homólogo, Hu
Jintao, para sentar las bases de una amplia cooperación bilateral,
principalmente para la exploración y refinación de petróleo.
En
2015 profundizó las relaciones con ese país, sobre todo luego de manifestar su
desacuerdo con las políticas y las exigencias de los organismos internacionales
financieros y comerciales, y dañar las relaciones con los Estados Unidos. En
esa oportunidad se suscribieron nueve convenios de cooperación en temas de:
educación, ciencia y tecnología, financiamiento y movilidad humana.
Además, se firmó un crédito concesional del Eximbank al Ecuador por 5.296
millones de dólares, destinado a proyectos sociales, de movilidad, riego e
infraestructura. Correa también alcanzó acuerdos para la creación de un
programa de becas del Gobierno Chino para estudiantes ecuatorianos y para el
intercambio de tecnologías. https://www.telecomunicaciones.gob.ec/gobierno-ecuatoriano-logra-acuerdos-con-gobierno-chino/#:~
En diciembre
de 2018 el presidente Lenin Moreno hizo una visita de estado a China, con el
propósito de fortalecer una "asociación estratégica bilateral
integral" y profundizar el diálogo político. En esa visita, Moreno buscó
impulsar la cooperación para proyectos de interés del país, en áreas como
hidrocarburos, minería, infraestructura y finanzas, así como concretar
inversiones para fomentar la industrialización, el desarrollo social y el
bienestar integral del Ecuador. Todo ello, "de conformidad con las
prioridades del Plan de Desarrollo “Toda una vida”. Además, el Ecuador adhirió
a la iniciativa “Franja económica de la ruta de la seda y ruta marítima de la
seda del siglo XXI”, lanzada el 2013 por el presidente Xi Jinping. https://www.publicafm.
ec/noticias/actualidad/1/Ecuador-china-relacion-estrategica
Hace pocos días, el presidente Lasso finalizó una
visita a China que tenía varios propósitos: avanzar en un posible acuerdo
comercial con ese país, renegociar la deuda del Ecuador con China y promover
algunos proyectos de inversión que podrían basarse en alianzas público –
privadas o que podría desarrollar la empresa privada.
En cuanto al primer aspecto, Lasso dice que hay en
principio la idea de negociar el acuerdo durante este año, con la aspiración de
que se lo firme con ocasión de un evento de China y Latinoamérica que se
efectuará en Guayaquil en noviembre próximo.
Con respecto a la deuda, al parecer hay un acuerdo
entre los dos gobiernos para facilitar un diferimiento o el cambio de algunas
de las condiciones que el Ecuador considera lesivas a sus intereses. Habría
dificultades en cuanto a retirar la garantía con petróleo de la deuda del país,
pero en todo caso se ha puesto el tema sobre el tapete y se aspira a que haya
aceptación china a la propuesta nacional. Por otra parte, el gobierno asegura que en
2022 no pedirá nuevos préstamos a China ni a los organismos internacionales de
crédito, porque las finanzas internas están marchando bien en cuanto a
ingresos.
En una entrevista posterior al viaje, el presidente
dice: “Necesitamos
renegociar la deuda con China, una deuda que a la fecha está en unos USD 4 600
millones. La mitad, USD 2 000 millones, está atada a un convenio de
comercialización de petróleo que es lesivo al interés del Ecuador. He sido muy
claro con el presidente de China: que nos sentemos a renegociar la deuda para
darle respiro a la economía ecuatoriana, para ampliar plazos, bajar tasas de
interés y desvincular este contrato de comercialización de petróleo, donde hay
intermediarios que se aprovecharon de China y Ecuador.” https://www.elcomercio.com/actualidad/ politica/guillermo-lasso-entrevista-negociacion-china.html
Para atraer inversiones chinas hacia el país se
efectuaron reuniones del presidente y de la comitiva que le acompañó, con
potenciales inversionistas institucionales y personales y, como siempre se dice
al volver de las giras presidenciales, se ha logrado pronunciamientos
favorables a la idea en varios de los asistentes a las reuniones de promoción
de los proyectos, que ojalá se materialicen.
Otros
resultados del viaje son: la entrega china de una cantidad importante de
vacunas para el COVID 19 que servirían para inocular a niños de edad temprana y
una ayuda destinada a las personas que resultaron afectadas por el aluvión sobre
Quito de la semana anterior, que se agradece mucho.
El acuerdo
comercial con China es importante, porque aparte del petróleo y los minerales,
que son de interés de ese país y que significan ventas por varios miles de
millones de dólares, el Ecuador tiene una gama de productos agropecuarios y
agroindustriales que, de lograr un ingreso con facilidades a ese mercado,
darían un gran impulso a la economía nacional. Muestra clara en este momento es
el camarón, que ha logrado situarse muy bien en el mercado chino y registra
exportaciones globales superiores a las del banano, que desde los años 50 del
siglo XX lideró las exportaciones nacionales (entre enero y noviembre de 2021
se exportó 3.168 millones de dólares de banano y 4.755 millones de dólares de
camarón, 46% a China).
Dado que
China es un país de 1.350 millones de habitantes, de que su clase media crece
constantemente y de que la población pobre se reduce notablemente, hay un
evidente crecimiento de la demanda por alimentos naturales y procesados y lo
que le conviene al país es investigar unos cuantos productos que puedan llegar
allá y tener éxito de ventas, sobre todo si se logra la eliminación de los
aranceles que, en algunos productos, llegan al 30%. A este respecto, el
Canciller decía que un producto que podría tener éxito de ventas sería la
pitahaya. El país cuenta también con el banano, el cacao y sus derivados, las
flores, alimentos procesados derivados de frutas tropicales y de la pesca, que
pueden tener amplia acogida en el mercado chino. De manera que lo que conviene
es que el gobierno negocie con acierto, para lo cual es una ayuda disponer del
llamado “cuarto adjunto”, en donde se reúnen los empresarios interesados en el
posible acuerdo, para asesorar a los funcionarios negociadores en el sitio y el
momento mismo de la negociación.
Hay voces,
sobre todo de algunos sectores industriales y artesanales, que manifiestan su
preocupación porque se llegue a firmar el acuerdo. Ya hay la experiencia con la
Unión Europea, en cuyo acuerdo se estipuló plazos para que las empresas se
ajusten a la nueva situación derivada de los compromisos. En este caso se debe
actuar de la misma manera, porque hay sectores como el textil y el del calzado
que piensan pueden verse comprometidos por la competencia. En ambos casos hay
que señalar que desde hace muchos años está presente en el país el contrabando
de productos chinos (que no pagan aranceles ni IVA) y que las empresas
nacionales contrarrestan esa competencia desleal.
Otras
industrias, generalmente de productos industriales de alto precio, deberán
ajustarse a la nueva situación, elevando su capacidad competitiva, aliándose
con los exportadores chinos de partes y piezas, maquilando productos o
ensayando otras opciones, porque la escala de producción y la tecnología china
son muy diferentes de las nacionales y sus costos son mucho menores que aquí.
Las
exportaciones del Ecuador a China han crecido de manera importante entre 2016 y
2020, pues han pasado de 656 millones de dólares en el primer año a 3.194
millones en el segundo, casi quintuplicándose, según los datos del Banco
Central. Las importaciones, en esos mismos años han sido de 2549 millones de
dólares y 3.171 millones, aumentado en el quinquenio en el 24%. La balanza
comercial, que siempre fue favorable a China, estaría equilibrándose.
Un aspecto
importante para considerar es el de la distancia entre el mercado chino y el
Ecuador, pues todo el comercio se mueve por mar. En la actualidad, los fletes
registran costos elevados, porque la demanda global pos COVID de China se ha
elevado sustancialmente y eso ha determinado que no haya espacios navieros y
tampoco suficientes contenedores disponibles.
Sin embargo, la situación se irá normalizando y en unos meses más es
posible volver a los niveles de antes de la pandemia.
Para esta relación
comercial y para el comercio exterior en general, es muy positivo que el
Ecuador cuente con los puertos de Posorja y Manta, capaces de recibir barcos de
gran calado, porque en ellos se puede transportar directamente a China y otros
mercados, volúmenes elevados de carga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario